Vodafone quiere integrar esos activos en Vantage, que saldrá próximamente a Bolsa, y Telefónica también podrá rentabilizar sus torres dentro de Cornerstone Telecommunications (CTIL).
Vodafone y Telefónica han firmado un acuerdo de larga duración para poder dotar de valor y monetizar su infraestructura de telecomunicaciones conjunta en Reino Unido a través de Cornerstone Telecommunications Infrastructure Limited (CTIL), una sociedad que ambas controlan al 50% bajo la fórmula de joint venture. Este pacto es efectivo desde este mes y regirá durante ocho años, con posibilidad de renovarse en tres ocasiones más por esa misma duración.
Mediante a esta operación, Vodafone puede integrar sus activos de CTIL en Vantage Towers, una fiilial de torres de telecomunicaciones compuesta por más de 68.000 sites en nueve mercados europeos, incluido España. El operador rojo pretende sacar a la bolsa de Fráncfort a principios de este mismo año Vantage, presente en Alemania, España, Grecia, Portugal, República Checa, Rumanía, Hungria e Irlanda, y también een Italia gracias al control del 33,2% de Inwit, empresa en la que también participa Telecom Italia.
CTIL se formó en 2012 para consolidar las redes de infraestructuras de Telefónica y Vodafone en Reino Unido, principalmente torres, que así se transfirieron a la nueva sociedad. La JV cuenta con 14.200 macro emplazamientos y 1.400 micro sites, todos estos torres, un despliegue fundamental para la próxima extensión de la tecnología 5G en tierras británicas.
Sin embargo, el objetivo de sacar a bolsa Vantage cambia el escenario. Vodafone quiere integrar los activos de CTIL y Telefónica podría aprovecharlo en un futuro. Así, esas torres ya no dependerían del grupo Vodafone, sino de Vantage (Vodafone al fin y al cabo), y esta sociedad cobraría fuerza de cara a su debut en el parqué.
UN ABANICO DE POSIBILIDADES PARA TELEFÓNICA
Telefónica también podría beneficiarse de este movimiento y de diversas formas. Una opción es crear una filial de infraestructuras en Reino Unido y potenciarla con los activos de CTIL; otra posibilidad pasa por la integración en la subsidiaria Telxius; también se podría vender ese grupo de activos a un tercero; y, por qué no, darle valor en la operación de fusión que Telefónica ha emprendido con Liberty Global en el mercado británico, a través de su marca O2.
No en vano, CTIL abarca el 53% de la cobertura del mercado en ese país, un relevancia derivada de prestar servicio a Vodafone y O2, operadores fundamentales en Reino Unido.
Mark Evans, CEO de Telefónica UK, ha afirmado: «Éste es un anuncio emocionante en nuestro camino para proveer conectividad de tipo global a nuestros clientes. El nuevo acuerdo nos permitirá desarrollar valor para nuestro negocio mientras invertimos en nuestra red de infraestructura».